
- Los derechos de autor protegen el trabajo de una persona o una empresa e impiden que otros lo utilicen sin permiso. Se aplican automáticamente cuando alguien crea contenidos creativos, literarios o no, como libros, películas, vídeos, imágenes, canciones o música, videojuegos y software. Si alguien copia o utiliza la obra de otra persona sin permiso, el autor puede llevar a esa persona a los tribunales. Sin derechos de autor, los creadores no recibirían una remuneración justa por su trabajo, lo que podría impedirles continuar con su actividad.
- Las licencias Creative Commons son licencias libres de derechos de autor que permiten a los demás compartir y utilizar contenidos creativos. De esta forma, el creador puede aplicar determinados términos y condiciones de uso a su obra, por ejemplo, especificar si se pueden compartir adaptaciones de su obra original o si su obra puede utilizarse con fines comerciales. Creative Commons también permite a un creador publicar su obra en el dominio público y renunciar a sus derechos.
- Las condiciones generales de la mayoría de los servicios en Internet estipulan que la reutilización, el intercambio y la descarga no autorizada de contenidos con derechos de autor están prohibidos en la plataforma. Algunas redes sociales y páginas web, para compartir vídeos, utilizan sistemas que les permiten detectar automáticamente las infracciones de los derechos de autor: las compañías discográficas, los estudios de cine y los canales de televisión cargan contenidos de referencia para facilitar la detección de infracciones.
- Si alguien utiliza contenidos protegidos por derechos de autor sin permiso, se le puede pedir que los retire de la plataforma. Algunas redes sociales bloquean o eliminan automáticamente los contenidos en caso infringir los derechos de autor. Algunos servicios de intercambio de vídeos pueden autorizar los contenidos, pero permiten a los creadores originales solicitar la monetización mediante anuncios para ser compensados por su trabajo.
- A veces resulta complejo saber a quién pertenecen los contenidos creados por medio de aplicaciones, servicios en Internet o compartidos en las redes sociales. Si eres el propietario de todo el contenido que publicas en una red social, la red también puede tener derechos de licencia para utilizar ese contenido. Esto suele incluir el derecho a adaptar y utilizar dichos contenidos como consideren oportuno, en todo el mundo y sin obligación de pagar por ello. Esto suele indicarse en las condiciones generales de uso y el usuario las acepta al crear una cuenta.

Consejos:
- Habla con tu hijo de los derechos de autor y su importancia. Explícale que los derechos de autor permiten que las personas reciban una remuneración justa por su trabajo y que si accedemos a ese contenido sin pagar, les impide ganarse la vida.
- Familiariza a tu hijo con las licencias Creative Commons y enséñele a reutilizar o compartir el trabajo de otras personas utilizando esas licencias. Recuérdale que sus propias creaciones y el trabajo de otros están automáticamente protegidos por los derechos de autor y que es importante pedir permiso al autor antes de utilizar su obra.
- Aunque a veces es fácil encontrar contenidos de pago disponibles de forma gratuita en Internet, eso no le da derecho a utilizarlos o compartirlos.
- Comenta con tu hijo que las redes sociales y los servicios en Internet pueden compartir los contenidos de sus usuarios sin pedirle permiso: ¿le parece justo? Hablad de qué contenidos quiere crear y compartir en Internet y qué le gustaría y qué no le gustaría que una red social compartiera o reutilizara.