
- En los juegos en Internet, en las aplicaciones y las redes sociales, los niños y los adultos se dan a conocer y se expresan de muy distintas maneras.
- Un niño puede presentarse de forma diferente en varios servicios en Internet. Por ejemplo, en algunos juegos y aplicaciones, tendrá la apariencia de un avatar o un personaje. Este avatar se le parecerá físicamente o reflejará aspectos específicos de su personalidad o de sus intereses. Muchos cambian regularmente de avatar para explorar diferentes apariencias e identidades.
- Los niños de entre 7 y 11 años suelen definir su identidad virtual por el tipo de actividades que les gusta llevar a cabo en Internet. Algunos lo hacen en función del grupo al que pertenecen. Puede que se comporten de una manera determinada en un pequeño grupo de amigos íntimos, pero actúan de manera muy diferente cuando utilizan un juego o una aplicación en el que interactúan con muchos usuarios.
- Los niños pueden utilizar las redes sociales o los juegos para explorar otros aspectos de su propia identidad o adoptar diferentes perfiles. Por ejemplo, los jugadores a veces tienen que definir su propia función. Quizás algunos niños quieran ponerse en los zapatos de una persona del sexo opuesto o de un grupo de edad diferente, o probar un comportamiento distinto al que tienen de manera habitual en la vida real. Otros querrán vivir el anonimato en Internet y experimentar la sensación de que la gente solo sepa lo justo de ellos.
- En ocasiones, una identidad virtual les ayuda a expresarse, sobre todo si tienen dificultades para comunicarse en la vida real. Por ejemplo, los niños tímidos a veces tienen más confianza en Internet porque se identifican con otro perfil. Los niños con necesidades especiales o discapacidades y para los que ciertas situaciones de la vida real les resultan difíciles, a veces, eligen un perfil diferente para que los demás usuarios hablen con ellos libremente y sin prejuicios.
- Conviene ser consciente de la presión que pueden sentir por parte de sus compañeros o de la sociedad que les lleva a adoptar un perfil o una identidad concreta en Internet.

Consejos:
- Habla con tu hijo sobre los avatares: ¿los utiliza? Si es así, ¿se parecen en algo a él o prefiere probar otras apariencias? ¿Tiene un avatar favorito?
- Pregunta a tu hijo qué piensa de su propia identidad en Internet y lo que muestra en la red. ¿Difiere de la persona que es en la vida real? ¿Por qué o por qué no?
- Recuérdale que otros usuarios también pueden adoptar diferentes identidades. La gente no siempre es lo que dice ser en Internet.
- Escucha en lugar de juzgar cuando hables de la identidad (o identidades) en Internet con tu hijo: quizás la utiliza para comprender mejor su propia identidad o cuestionarla. Recuérdale que puede hablar contigo si tiene preguntas sobre quién es, sus relaciones o cómo piensa y se comporta la gente.